A medida que crece la demanda de alimentos saludables y sostenibles, los productores deben adoptar tecnologías innovadoras como forma de preparar los sistemas agrícolas para el futuro. Son eficaces, limpias, fáciles de adoptar y contribuirán a devolver hectáreas de terreno a la naturaleza que antes se perdían con las técnicas agrícolas tradicionales.
Afortunadamente, la revolución de la producción de alimentos es una de las piedras angulares del Green Deal Europeo, cuyo objetivo es garantizar que todos los habitantes del continente tengan acceso a alimentos "saludables, asequibles y sostenibles".
"La crisis de coronavirus ha puesto de manifiesto lo vulnerables que somos todos y lo importante que es restablecer el equilibrio entre la actividad humana y la naturaleza", señala Frans Timmermans, Vicepresidente Ejecutivo de la Comisión Europea. "En el centro del Green Deal, las estrategias Biodiversidad y "De la huerta a tu mesa" apuntan a un nuevo y mejor equilibrio entre la naturaleza, los sistemas alimentarios y la biodiversidad, para proteger la salud y el bienestar de nuestros ciudadanos".
En particular, la pandemia ha puesto de manifiesto nuestra dependencia y la fragilidad de las grandes líneas de producción agrícola que dependen en gran medida de métodos de explotación, intensivos e ineficientes en el ámbito de la pesca y la ganadería.
"Según las Naciones Unidas, casi el 90 % de las poblaciones de peces marinos del mundo están ya totalmente explotadas, sobreexplotadas o agotadas: se necesitan políticas sensatas para conservar las poblaciones de peces, combinadas con una piscicultura responsable", señala Bill Bien, Leader of Agricultural Lighting business en Signify.
"Con nuestra iluminación LED ayudamos a los clientes a mejorar la eficiencia de las piscifactorías de salmón en el mar, a mejorar los índices de conversión de los alimentos, a reducir los costes y a disminuir el riesgo de infecciones", afirma Bien.
Los peces dependen de la luz para determinar la hora y las estaciones, lo que contribuye a los índices de conversión de alimentos y al crecimiento general. Sin embargo, en los criaderos de mayor tamaño y más profundos, así como en los mares más agitados en aguas abiertas, la luz a menudo no atraviesa la superficie.
Sin embargo, con las soluciones de iluminación acuícola en el mar y en agua dulce de Signify, se distribuyen hasta 100.000 lúmenes de LED de manera uniforme por toda la columna de agua, centrándose específicamente en los puntos oscuros y simulando los ritmos biológicos de los peces. La difusión de luces más profundas promueve que los animales naden también a una mayor profundidad, evitando las larvas de piojos de mar que viven en la superficie y mejorando la eficacia de la conversión en alimento, lo que reduce la contaminación marina y mejora el bienestar de los animales.
La iluminación utilizada con tanto éxito en la cría de salmón es igualmente aplicable al sector de la dorada y la lubina de la UE. Esta última, centrada en el Mediterráneo (en particular en Grecia, Italia y España), puede beneficiarse de esta tecnología a medida que se dispara la demanda de este tipo de pescado. Según la empresa de estudios de mercado IMARC, el mercado mundial de la dorada y la lubina aumentó su tasa de crecimiento anual alrededor del 5 % entre 2015 y 2020.
Remco Lansbergen
General Manager for Aquaculture solutions en Signify
Signify está preparado para aprovechar las oportunidades que ofrecen los planes de estímulo que respaldan las innovaciones en iluminación, ayudando así a contribuir a las iniciativas insignia del Green Deal.
En cuanto a la disponibilidad de alimentos, Signify no solo cuenta con soluciones para acuicultura, sino que también cuenta con tecnología de iluminación para horticultura y agricultura vertical. Esta última representa otro ingrediente saludable para la producción sostenible de alimentos. Los cultivos verticales de interior, que son posibles gracias a las recetas de luz optimizadas, utilizan menos agua, eliminan la necesidad de pesticidas y reducen la distancia de transporte de los alimentos.
"La adopción de la tecnología digital en la acuicultura y agricultura en general, respalda los objetivos comunes de muchos programas de estímulo gubernamental para reducir las emisiones de carbono y mejorar la biodiversidad, quitando presión a los recursos naturales", señala Harry Verhaar, Head of Public and Government Affairs en Signify. "Los responsables políticos tienen una oportunidad de oro para estimular la inversión en la agroindustria y reducir la distancia de la huerta a la mesa. Si somos inteligentes sobre cómo utilizamos nuestros recursos, podemos ayudar a alimentar el planeta y a apoyar la biodiversidad. No deben ser objetivos mutuamente exclusivos, sino complementarios".
Los holandeses han demostrado que la unión entre la agricultura intensiva y la tecnología funciona. Los Países Bajos son el segundo mayor exportador de productos agrícolas del mundo después de Estados Unidos, un país con una superficie 270 veces mayor. ¿Cómo lo han conseguido? "Si vuelas a Ámsterdam por la noche, verás un tenue resplandor procedente de hectáreas de invernaderos, ahí está la clave. Se trata de innovación y tecnología", añade Verhaar.