Conceptos de los que hace años sólo se hablaba de ellos, como la digitalización, la eficiencia energética, la IoT, la conectividad, el autoconsumo, o el vehículo eléctrico… han pasado a ser claves en la demanda residencial, terciaria e industrial, e incluso ya son la base de los principales planes gubernamentales de recuperación económica y de ayudas para la economía, como por ejemplo los fondos europeos Next Generation.